LAS MONARQUÍAS ÁRABES SON EL CABALLO DE TROYA DE LA LIGA ÁRABE. Por Mah Iahdih Nan

 

 

Estos días se desarrolló en Argel la cumbre de la Liga Árabe, un organismo compuesto en teoría por los países árabes. Sin embargo, es un organismo descompensado, deformado, artificial e interferido formado por dos grupos; por un lado las Repúblicas Árabes y por otro lado una especie de Estados que en el fondo son familias mafiosas que gobiernan las monarquías del Golfo más Jordania y Marruecos.

Este organismo, no cumple ninguna función de utilidad para la nación árabe, es un invento intervenido por el MOSSAD y la CIA  para destruir cualquier intento de proyectar una verdadera unión Árabe. Las monarquías árabes son el caballo de Troya de la Liga Árabe.

Los objetivos y los intereses  de los dos grupos son diametralmente opuestos. La mayoría de los países Árabes que conforman el primer grupo, ponen su interés y sus esfuerzos para que este organismo cumpla alguna función en beneficio de la nación árabe. El segundo grupo compuesto por las monarquías feudales árabes, sus objetivos son básicamente torpedear  cualquier éxito de este irreal organismo y su participación es justo para evitar que este organismo funcione de manera adecuada. La agenda de estas monarquías está al servicio de otros intereses (Israel y el Lobby judio-americano) muy distantes y separados de los de la nación árabe.

Desgraciadamente, estas monarquías, emiratos y sultanatos han intentado por todos los medios boicotear la cumbre de Argel y reventar el gran esfuerzo derrochado  por el estado Argelino en aras de  unificar a la nación árabe.

Estos estados formados por familias mafiosas, entregados, controlados y maniatados por el estado sionista de Israel, cuya existencia y objetivos son básicamente  la destrucción de la nación árabe.

Argelia ha conseguido lo que jamás se ha logrado, la unificación de todas las facciones palestinas  divididas desde los años setenta  por el estado hebreo con la complicidad de todas las monarquías del Golfo más Jordania y Marruecos.

El logro cosechado por la diplomacia argelina en vísperas de la cumbre árabe, constituye una afrenta que deja en evidencia los planes de todas estas monarquías que están al servicio del apartheid sionista, eterno  enemigo de la nación árabe. 

El objetivo de todas las monarquías del Golfo más Jordania y Marruecos es destruir la armonía, el entendimiento y la unión de los pueblos árabes. Con la complicidad de la CIA y el MOSSAD han destrozado al Líbano, Irak, Siria, Yemen, Libia, Sudán y Somalia y han domesticado y domado a Egipto y han intentado sin éxito destruir a Argelia y Túnez, el resto son estados insignificantes que no amenazan su existencia.

Estas monarquías feudales ven en la ansiada Unión Árabe,  una amenaza y un peligro para su existencia, no admiten que sus súbditos se sientan ciudadanos como en el resto de países árabes,  porque estos verían la libertad y la democracia de la que disfrutan la mayoría de los pueblos árabes que viven bajo regímenes que no son monárquicos. 

Las  poblaciones de estas monarquías están sometidas por un sistema anclado prácticamente en la baja edad media, marcado por un vasallaje y la existencia de castas inconcebibles en la era moderna, algo consentido y apoyado por la mayoría de las democracias occidentales.

A toda está situación habrá que agregarle que todas estas "casas reales" están de alguna manera controladas, vigiladas, dominadas  e incluso protegidas por el estado sionista de Israel. Se sabe que todas estas familias "reales" tienen estrechos vínculos con el MOSAD, los acuerdos de Abraham son un fiel testigo incómodo para estas casposas monarquías, estos acuerdos aparte de certificar su traición a la lucha de los pueblos árabes, corroboran lo que ya era un secreto a voces, las ataduras y lazos entre Israel y estas monarquías, que datan prácticamente desde la fundación del estado de Israel.

Muchos documentos filtrados y desclasificados por la CIA y el propio MOSSAD prueban las íntimas y estrechas relaciones entre las familias monárquicas de estos estados con el estado hebreo. Uno de los ejemplos más claros son los documentos desclasificados por el MOSSAD en los que consta que Hassan II  transmitió todo el contenido de la cumbre árabe previa a la guerra de los seis días al MOSAD, que a la postre, esa información resultó decisiva para la victoria de las fuerzas hebreas. También es cierto que el Lobby judío-americano juega un papel importantísimo para redondear y reafirmar esa conexión entre Israel y las monarquías árabes.

Es también interesante reconocer y señalar la tibieza de los dirigentes palestinos a la hora de denunciar los acuerdos de Abraham que le han propinado una puñalada casi mortal a la lucha y los derechos históricos del pueblo palestino. Hasta el momento ningún dirigente de ninguna facción Palestina ha levantado la voz para denunciar la convivencia y complicidad de todas las  monarquías árabes con Israel a excepción quizás de Qatar. ¿A que se debe este silencio de los dirigentes palestinos? Han antepuesto las migajas de ayudas que les conceden algunas de estas monarquías a los históricos y justos derechos del pueblo palestino?. Todo indica que esa sería la razón de este sepulcral y vergonzoso silencio de los dirigentes palestinos.

El Majzen Marroquí, lleva varios meses intentando hacer fracasar está cumbre. Ha utilizado todas las maniobras posibles para hacer naufragar la cumbre, desde gestiones con las demás monarquías para evitar su participación hasta las provocaciones y agresiones de última hora de su ministro de Exteriores, el impresentable y pendenciero Bourita.

El régimen marroquí  a través de su pasquín favorito Jeune Afrique filtro hace casi un mes la presunta participación del alcohólico parisino Mohamed VI rey de Marruecos, en la cumbre de Argel. Los que conocen el Majzen, sus  maniobras, sus artificios y sus operaciones sabían perfectamente que Mohamed VI no iba a  Argel. Sólo eran táctica dilatoria, de confusión y de despiste, todo forma parte de las maquinaciones majzenianas para hacer naufragar la cumbre de Argel.

El Majzen Marroquí tiene una obsesión patológica con el estado argelino, que la ha inoculado en los súbditos marroquíes, solo hay que darse una vuelta por las redes sociales para entender la obsesión enfermiza del Majzen hacia Argelia.

Las maniobras del Majzen para hacer fracasar la cumbre árabe de Argel, contó con la inestimable cooperación de casi todas las monarquías feudales del Golfo, a excepción de Qatar que funciona como un verso suelto en ese oscuro y tenebroso mundo monárquico. La táctica consistía en propiciar una desbandada de Reyes y Sultanes, que anunciarían  pretextos peregrinos para no acudir a Argel. Todo estaba previamente preparado y estudiado entre las monarquías árabes e  Israel.

 Marruecos junto con Israel eran los autores intelectuales de este bloqueo, mantendría la incertidumbre hasta el último momento para aparentar tener una agenda independiente del resto del grupo. El plan incluye provocaciones, campañas de desinformación, ataques directos e incluso llamamientos a la reconciliación entre Argelia y Marruecos. Es decir el Majzen después de las mil y una agresión al estado y al pueblo argelino, pretende que Argelia olvide de golpe porrazo:  Pegasus, difamaciones varias, intentos de desestabilización, acusaciones falsas relacionadas con la inmigración, introducción de drogas, campañas orquestadas en organismos internacionales e intentos de aislar a Argelia además de las agresiones a civiles argelinos en territorio mauritano. El Majzen pretende insultar por la mañana, tener buenas relaciones por la tarde y difamar por la noche, la típica y clásica política esquizofrénica del Majzen marroquí.

Concluida la cumbre, el Majzen, como parte de su propaganda y demagogia, se sacó un as de la manga, invitando al Presidente argelino Abdelmajid Tabouni a mantener una reunión en Marruecos, algo insólito en la diplomacia internacional.  Acaban de intentar bloquear la cumbre árabe, y renunciar a última hora a su participación en una cumbre que sería el escenario propicio para la distensión y reconciliación e inmediatamente después como si esto fuera un juego de niños, le piden al Presidente Abdelmajid Taboune que venga a Marruecos.

 Una vez más el régimen marroquí, dejando constancia de su total ignorancia y desconocimiento de la idiosincrasia y carácter orgulloso de los argelinos, pretende que el Presidente Taboune vaya a Marruecos a rendirles pleitesía. Es prácticamente imposible extraer una conclusión coherente y razonable del comportamiento del Majzen Marroquí. Su arrogancia, ignorancia, insolencia y confusión descolocan al más positivo y optimista  de los moderados y esperanzados.