SÁNCHEZ, ATRAPADO EN SU SOLEDAD por Mah Iahdih Nan

 

Después del ya conocido aislamiento de Sánchez en la política interna, donde todas las formaciones políticas sin excepción se han manifestado en contra de su giro ilegal, improcedente, imprevisible, solitario e injustificado en relación con la historica y firme posición  de España con respecto a la descolonización del Sahara Occidental.  Además de la oposición de los partidos políticos de todas las tendencias, Sánchez se ha encontrado con la hostilidad de la sociedad civil y la mayoría de las Comunidades autónomas y los ayuntamientos. Sánchez, incluso ha dejado huérfanos  a miles de cargos y militantes socialistas que verbalizan día sí y otro también que no han conseguido entender su incomprensible giro. Sólo acompañan a Sánchez en esta suicida aventura entreguista los miembros de su Gobierno, aunque muchos de ellos lo hacen con la boca pequeña  y la nariz tapada, para proteger su sueldo y su cargo. La soledad de Sánchez se acentúa con las purgas internas dentro del partido y que han empezado está semana con las primeras dimisiones en el seno del partido. 

Ahora Sánchez ha empezado a cosechar la negativa de los países europeos más importantes e influyentes. Primero fue Alemania que en una respuesta parlamentaria afirmó que su posición está con los esfuerzos de las Naciones Unidas y sobre todo con soluciones que respeten el derechos de autodeterminación del pueblo Saharaui, lo que automáticamente excluye la solución de la autonomía la preferida del Majzen Marroquí, Sánchez y Trump. 

A Alemania le siguieron está semana Italia y Portugal que abogaron por una solución en el marco de las Naciones Unidas y el respeto escrupuloso a la legalidad y el derecho internacionales con  lo que envían un mensaje claro y contundente al Majzen Marroquí y a su compañero de viaje Sánchez de que la autonomía no es la opción idónea al no ajustarse al derecho internacional. Es más Italia se avanzó un paso más al declarar su total convergencia con Argelia en el asunto de la descolonización del Sahara Occidental.

Casi todos los países han detectado dos cuestión esenciales y prioritarias para entender el conflicto Saharaui; la primera es que la llamada autonomía no se contempla en ningún caso  como salida a un proceso de descolonización  porque no cumple ningún criterio de los establecidos para ejercer la libre determinación de los pueblos y la segunda, a todos los países, mediadores internacionales, especialistas, analistas y políticos les ha quedado definitivamente clara a voluntad real del régimen Marroquí, de aceptar sólo la política de los hechos consumados, es decir la anexión por la fuerza del territorio Saharaui. Esa es la conclusión más clara que se extrae de los 30 años de proceso de paz y de las tácticas dilatorias y las argucias utilizadas por Marruecos durante todos estos años para obstaculizar y obstruir cualquier solución; Ha rechazado todas las propuestas de todos los Representantes de las Naciones Unidas, desde el Referéndum pasando por la solución intermedia del llamado Plan Baker y todas las soluciones transitorias propuestas por los Representantes internacionales, así como los sistemáticos bloqueos a la labor de los enviados Especiales, sirva  como ejemplo el denigrante trato dispensado hace 10 días a De Mistura en su última visita a Marruecos.

La desconexión de la realidad que llevó a Sánchez a tomar de forma personal, sin contar con ningún tipo de apoyo, la decisión de lanzarse a los brazos del sátrapa marroquí, aún hoy, cuatro meses después, sigue siendo una incógnita. Lo único que ha quedado meridianamente claro, es que los presuntos éxitos del cambalache protagonizado en solitario por el dúo Sánchez-Albares han sido un desastre total, todo el humo que vendieron cuando fueron a rendir pleitesía al sátrapa marroquí quedó en nada. Nos montaron una humareda que garantiza la integridad de Ceuta y Melilla, Canarias, y Andalucía de la que nadie ha vuelto a saber nada. Se inventaron el control definitivo de la inmigración y esta sigue llegando igual que siempre, incluso los números hablan de una ligera subida, incluyendo la vergonzosa, injustificada y criminal masacre de los africanos en la valla, que le ha merecido a España el reproche y la reprimenda de todos los organismos internacionales, que la han colocado a la altura de dictadura marroquí. También intentaron vender la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla y el consiguiente desarrollo económico de las dos ciudades, algo que sigue en el aire en espera de la caprichosa política del majzén marroquí. En definitiva la capitulación del dúo Sánchez-Albares al sátrapa Mohamed VI, no ha aportado nada positivo ni beneficioso para los intereses de España y pasará a la historia como la subordinación más inútil y estúpida que se haya conocido a lo largo de la historia       

La soledad de Sánchez ha quedado patente esta semana con la firma del acuerdo del suministro energético entre Italia y Argelia, acuerdo en el que participan multinacionales de Francia, Estados Unidos e Italia y en el que han quedado fuera las empresas españolas, las más beneficiadas en la contratación, durante los últimos 30 años por la administración argelina. Antes el Gobierno argelino ya había llegado a acuerdos de colaboración energética con las autoridades francesas y alemanas.

 Todo este paquete de acuerdos económicos a diferentes bandas, deja una víctima clara y rotunda; la economía española. España ha pasado de aspirar a ser el HUB gasístico europeo a posiblemente tener que  sufrir cortes de luz y cargar con precios desorbitados e inasumibles en los próximos inviernos. 

 Este futuro negro que se avecina para los bolsillos de los  españoles es la consecuencia de las catastróficas y miopes decisiones que han priorizado la política del chantaje, de los intereses ocultos y de los beneficios particulares a la visión estratégica de largo alcance que aportaría proyectos ambiciosos que beneficiarían a la economía española en su conjunto, en estos momentos cruciales que vive la humanidad, en determinados sectores decisivos y estratégicos que hubieran hecho de España una potencia mundilal imprescindible en el sector energético. Pero desfortunadamente, la gestion desastrosa del duo Sánchez-Albares es la principal responsable de estos desaciertos que han convertido las buenas perspectivas que tenia la economia española en un futuro funesto y aciago.