La cumbre UE-UA y “la bofetada de realidad” al Majzen Marroquí* Por Mah Iahdih Nan
Aunque no es la primera, ni la segunda, ni la tercera la RASD lleva desde el 2017 sentándose en la misma mesa que Marruecos, al menos tres o cuatro veces al año. Las cumbres de jefes de los jefes de estado y de Gobierno de la UA, o las cumbres bilaterales con otros organismos internacionales hacen fe de ello y son un testigo vivo que el Reino feudal de la mentira y la propaganda intenta por todos los medios tapar.
El lema del ideario del Majzen marroquí es, “miente que algo queda”. Para ello tan solo tiene que dar la voz para que toda la maquinaria del conglomerado del majzen; sus súbditos (clase política), los medios de prensa avasallados y sus innumerables cuerpos de espionaje, se lancen a fabricar inverosímiles falacias y calumnias. Toda esta amalgama compuesta por un ejército dirigido por los tres mayores súbditos del Reino; Hamouchi, Mansouri y El Hima, su principal ocupación es la protección de la familia Alaouita y estar a su servicio, no tiene otro cometido. Para llevar a cabo su objetivo se puede recurrir a cualquier método; En Marruecos para proteger a los Alauitas todo es legal.
La autocracia marroquí, lleva cincuenta años repitiendo la misma sarta de mentiras e infamias tales como; la RASD no existe, el pueblo Saharaui no existe, los Saharauis de los Campamentos están secuestrados, los Saharauis son marroquíes, el POLISARIO son mercenarios y marionetas de Argelia etc etc … Todo ese montón de falsedades, invenciones y manipulaciones han acabado siendo verdades, en el imaginario del Majzen y sus ignorantes, desinformados y manipulados súbditos. El Majzen ha hecho suyo aquello de Gobbels “una mentira repetida mil (millones) veces se convierte en una realidad”
Pero como se dice habitualmente que la mentira tiene las patas cortas, en los últimos años el Majzen cada dos por tres se da un ”bofetón de realidad” y todas sus consignas y soflamas propagandísticas chocan con la cruda realidad de los hechos. De todos modos en Marruecos impera un sistema grosero y descarado que cada vez que se da un baño de realidad cambia de rumbo y de estrategia escogiendo otra vía aún más indecente, obscena e insolente que la anterior.
La presencia del Presidente de la RASD en la cumbre UE-UA, es el último y más explícito ejemplo de toda esta política errática, fraudulenta y tramposa que práctica el Majzen Marroquí. Justo dos días antes de esta cumbre el charlatán Nacer Bourita, vendía humo a la parroquia majzeniana, para su consumo interno, diciendo que el problema del Sahara no existe y para reafirmarlo ponía como ejemplo, que la cumbre de los jefes de estado de la UA, en la que estuvo sentado a tres sillas del presidente Saharaui; no trató el conflicto Saharaui, lo que según su obtuso, ofuscado y marrullero entender es un victoria de Marruecos.
La imagen del soez Bourita entrando a la sede de la cumbre UE-UA, enrabietado, gesticulando su contrariedad, manoteando como un gamberro en el patio de un colegio y con el semblante desencajado, anunciando a los cuatro vientos su rabieta infantil. La irritación mostrada por Bourita a su entrada a la cumbre es el resultado del caos que impera en el Majzen, en primera instancia anunciaron la presencia del primer ministro y a última hora como muestra de su enfado con la UE- UA le cargaron el muerto al caradura Bourita, que es el sabueso capaz de comerse todos los marrones. Muchos, cuando lo vieron entrar desdeñando y menospreciando a todo el personal con el que se iba cruzando, recordaron sus andanadas, hace cuatro años en Maputo en la cumbre África-Japón cuando se puso el uniforme de seguridad y se cuadró en la puerta para hacer el control de entrada a la conferencia, agrediendo a la Delegación Saharaui. En aquella ocasión la seguridad legítima de la cumbre tuvo que emplearse a fondo utilizando la fuerza para reducir a Bourita y sus gorilas del acceso a la sede de la reunión.
Esta interpretación de Bourita, representa el descrédito total de una diplomacia desprestigiada que zozobra día tras día y que deja bien claro, el estado de ánimo y el sentir actual de las estructuras más profundas del Majzen marroquí, caracterizado por la histeria, el nerviosismo y los disparates.
Cuando Bourita escenifica sus aspavientos y gestos corporales braceando y despreciando las indicaciones del personal de la organización, Así como su desaire y mala educación hacia el protocolo de la cumbre, está revelando que el castillo medieval construido a base de falsedades e invenciones, donde el Majzen ha estado instalado los últimos 47 años, se está desmoronando por su propio peso.
Por el contrario, la entrada del presidente Saharaui, Brahim Gali en el recinto de la cumbre, dista mucho de las muecas del vulgar y ordinario Bourita. Aunque la RASD sea un estado pequeño y gran parte de su territorio ocupado por la fuerza por el régimen marroquí, su presencia en Bruselas tiene un hondo significado histórico y moral, que refuerza su existencia, reafirma que es una realidad incontestable e irreversible y asestó un durísimo golpe a la propaganda Goebbeliana del arcaico Majzen marroquí.
La presencia de la RASD en la cumbre UE-UA también deja un mensaje demoledor a España como estado soberano. En lo referente a los chantajes y presiones del Majzen marroquí, cada vez España libremente intenta asumir parte de su responsabilidad en el daño que ha causado al pueblo Saharaui. ¿Como es posible que la acogida humanitaria de una persona enferma provoque la ira del vecino del Sur que presuntamente motivó la invasión de Ceuta? Y ¿Por qué ahora esa misma persona se sienta entre más de ochenta jefes de Estado con toda normalidad, entre ellos mandatarios de España y del propio Marruecos?. Algo no cuadra en esta ecuación que España debería analizar con detenimiento y extraer sus propias conclusiones.
Un país serio y creíble no puede provocar una crisis monumental con declaraciones y comunicados ofensivos y vejatorios, a los que hay que sumar la campaña de desprestigio y acusaciones falsas, la retirada de la embajadora, la paralización de infinidad de iniciativas de cooperación y colaboración y el bloqueo de sectores estratégicos que perjudican la economía de ambos países. Todo esto se hizo con la excusa de la acogida por el COVID del presidente Saharaui, que varios meses después se sentaría en la misma mesa de la cumbre de jefes de estado de la UA, con los representantes del Gobierno Marroquí y ahora en la cumbre UE-UA. Este es el mensaje que el Estado español debería descifrar y aclarar con el régimen feudal marroquí: ¿por qué me niegas prestar una ayuda humanitaria a alguien con el que te sientas en la misma mesa tres o cuatro veces al año?
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